Hemos implementado agilidad en la organización, pero lo que ocurre es que la reunión de seguimiento habitual ahora se llamada Daily Meeting, y la de toma decisiones de la gerencia se llama Spring Planing, cuando las personas no han cambiado su mindset siempre responderán desde el hábito, pero aquí te decimos cómo transformarlo.
Empecemos por algunos conceptos básicos. Después de consultar diferentes fuentes, defino la agilidad como “la capacidad de responder eficazmente a las propuestas del entorno”. Por otra parte el mindset hace referencia al modelo mental, ese conjunto de pensamientos, verdades y patrones con los que respondemos a la vida. Entonces cuando hablamos del mindset ágil, nos referimos a un modelo mental que nos permite responder eficazmente a las propuestas del entorno.
En efecto, nuestros comportamientos son el resultado del conjunto de creencias, valores, patrones de respuesta y más, que están configurados en nuestra “mente”, o tal vez, es más correcto decir, en nuestro ser. Evolucionar hacia un midset agile nos exige un proceso de transformación profundo, que ocurre en la persona una vez que decide tomar este camino, momento en el que empiezan las batallas, es por eso que vemos generalmente que las personas usan la Daily Meeting para hacer reuniones de seguimiento tradicionales con un nombre ágil, porque es lo que están habituados a hacer.
Primero que nada es importante reconocer el esfuerzo que requiere que las personas evolucionen hacia un mindset ágil, no será rápido, requiere decisión, determinación y es un camino a transitar de manera personal y colectiva.
Para promover esta evolución hay que abordar 2 áreas:
1. Personal:
a. Entender cuál es nuestra zona segura que nos aleja de la agilidad:
Que verdades y patrones tenemos en relación con, cómo son las cosas en lo laboral. Tales como; el líder debe tener las respuestas, debe dar las soluciones, nadie puede estar por sobre el líder, mis ideas tiene más importancia, fallar es incorrecto, yo no fallo, no puedo/no se puede decir no.
b. Ordenar cuáles de estas verdades están siendo más obstaculizadoras de nuestro mindset ágil.
c. Movernos intencionalmente fuera de esta zona segura eligiendo comportamientos más ágiles.
d. Tener una estrategia para atravesar la incomodidad de salir de la zona segura.
e. Ir paso a paso, sin entrar en la zona de pánico.
Para ayudar a las personas en esta transición es útil el coaching, mindfulness, mentoría, lecturas guiadas, espacios de conversación, todo lo que sirva para activar la consciencia y entrenar la capacidad de elegir.
2. Entorno:
a. Identificar qué aspectos de la cultura, procesos y estructura son contrarios u obstaculizan los principios ágiles.
b. Iniciar un plan ágil de transformación cultural hacia la agilidad, que permita promover y sostener la evolución de las personas; que vaya más allá de implementar marcos y prácticas ágiles, empezar por la base.
Para llevar a cabo esta transformación considera Lean Change Management como una metodología ágil de cambio que puede servir de guía al proceso.
Vivir la agilidad organizativa es posible y necesario, es mucho más que implementar prácticas y herramientas, es una evolución de las personas y el entorno, y como tal debe abordarse.
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